Frustrado por una nueva final perdida, la cuarta que juega y pierde con la selección argentina, el capitán Lionel Messi le cerró la puerta a la albiceleste.
El vigente Balón de Oro, que cumplió 29 años el viernes, se cansa de ganar títulos con el Barcelona y ha logrado cinco galardones como mejor jugador del mundo, pero no pudo trasladar toda su magia a la selección argentina.
Su última decepción llegó el domingo al perder en penaltis la final de la Copa América Centenario contra Chile en el estadio MetLife de East Rutherford, enfrente de Nueva York.
'La Pulga', que parecía que esta vez sí iba a liderar a Argentina a cortar una racha de 23 años sin títulos, nuevamente vio cómo la corona se le escapaba de las manos por tercera vez en tres años, tras las finales del Mundial de Brasil-2014 y la Copa América de Chile-2015.
Nacido en Rosario, 300 kilómetros al norte de Buenos Aires, un 24 de junio de 1987, padre de Thiago y Mateo y casado con Antonella Roccuzzo, Messi llega a su último año como veinteañero transformado ya en un hombre maduro.
Desde Rosario, cuna de los entrenadores del campeón de América, Juan Antonio Pizzi, y del suyo en la albiceleste, Gerardo Martino, Messi saltó a Barcelona a los 13 años después de que River Plate lo rechazara por sus problemas de crecimiento.
Pero el club catalán le solventó el tratamiento hormonal, lo cuidó y él lo devolvió con cuanto título se le cruzó por el camino.
Líder de su selección y del Barcelona, ganador implacable de todo título posible con el conjunto azulgrana (8 ligas, 4 Copa del Rey, 4 Champions League de Europa, tres mundiales de Clubes), Messi llegó a Estados Unidos para sacarse la profunda espina que tiene clavada con la absoluta albiceleste.
Campeón Mundial Sub-20 en Holanda-2005, medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín-2008, Messi necesitaba que esta revancha con Chile, verdugo en la final de la Copa América del año pasado, fuera la vencida.
Pero la suerte le volvió a dar la espalda y Messi lo vio con lágrimas en los ojos.
Ya está, se terminó
"Ya está, se terminó para mí la selección argentina", dijo Messi desilusionado tras la derrota ante la Roja, en un partido en el que además falló el primer penalti de la definición desde los doce pasos mandando el balón por encima del larguero.
"Es un momento duro para mí y para todo el equipo, es muy difícil para mí seguir así, por todo, ya está, se terminó para mí la selección argentina", confesó la 'Pulga'.
Lejos quedó el récord de máximo anotador de la historia de la selección argentina logrado el martes en las semifinales contra Estados Unidos, cuando con un soberbio tiro de falta batió al portero Brad Guzan y anotó su tanto número 55, uno más que el legendario Gabriel Batistuta.
La final perdida en esta Copa América arruina el reciente nuevo doblete Liga-Copa del Rey con el Barcelona y lo aleja de un sexto Balón de Oro, actualmente en sus manos por lo hecho en 2015.
También le impide el asalto final al reducido olimpo de las leyendas del fútbol integrado por Pelé, Diego Maradona y los fallecidos Johan Cruyff y Alfredo Di Stéfano.
fuente Afp
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